1 Corintios 13:4-7

El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. 1 Corintios 13:4-7



miércoles, 21 de marzo de 2012

La ceguera del hombre

Hola a todos mis lectores. ¡Cuánto tiempo sin pisar este blog! jejeje, si, lo sé, he estado muy ajetreada con cosas de estudios y otras cosas pero bueno no me he ido ni me pienso ir así que espero que no dejéis de leerme por esto. Os estoy agradecida por haber seguido leyendo a pesar de que no he escrito nada en casi dos meses desde mi última entrada, muy agradecida de verdad, eso significa que lo estoy haciendo bien siendo una novata en esto jeje. Aquí pues os dejo una entrada de reflexión que a mi, particularmente, me impactó mucho. 


"Pero los discípulos se habían olvidado de llevar comida y sólo tenían un pan en la barca. Mientras cruzaban el lago, Jesús les advirtió: «¡Atención! ¡Tengan cuidado con la levadura de los fariseos y con la de Herodes!».
Al oír esto, comenzaron a discutir entre sí, pues no habían traído nada de pan. Jesús supo lo que hablaban, así que les dijo:
   —¿Por qué discuten por no tener pan? ¿Todavía no saben ni entienden? ¿Tienen el corazón demasiado endurecido para comprenderlo? “Tienen ojos, ¿y no pueden ver? Tienen oídos, ¿y no pueden oír?” ¿No recuerdan nada en absoluto?  Cuando alimenté a los cinco mil con cinco panes, ¿cuántas canastas con sobras recogieron después?
 —Doce —contestaron ellos.
 —Y cuando alimenté a los cuatro mil con siete panes, ¿cuántas canastas grandes con sobras recogieron?
  —Siete —dijeron.
 —¿Todavía no entienden? —les pregunto.
 Cuando llegaron a Betsaida, algunas personas le llevaron a un hombre ciego ante Jesús y le suplicaron que lo tocara y lo sanara. Jesús tomó al ciego de la mano y lo llevó fuera de la aldea. Luego escupió en los ojos del hombre, puso sus manos sobre él y le preguntó:
   —¿Puedes ver algo ahora?
 El hombre miró a su alrededor y dijo:
   —Sí, veo a algunas personas, pero no puedo verlas con claridad; parecen árboles que caminan.
 Entonces Jesús puso nuevamente sus manos sobre los ojos del hombre y fueron abiertos. Su vista fue totalmente restaurada y podía ver todo con claridad. Jesús lo envió a su casa y le dijo:
   —No pases por la aldea cuando regreses a tu casa."

Estos versículos pertenecen al evangelio de Marcos capitulo 8, del 14 al 26 donde como bien habréis leido anteriormente, Jesús les advierte sobre la levadura de los fariseos y de los herodianos, como los discípulos se confunden con lo que dice y luego la historia del ciego sanado en dos etapas. Bien, vamos a analizar esta cuestión. Este estudio me tocó hacerlo a mi en una reunión de GBU y la verdad, al principio cuando lo leí así de sopetón como quien dice, no lo entendí, me quedé pensando como los discípulos, preguntándome que era eso de la levadura de los fariseos y los herodianos. Conforme fui leyendo una y otra vez y pidiéndole al Señor que me diera entendimiento, comprendí que Jesús se refería a la doctrina de aquella gente, a su férrea ancla de las tradiciones humanas y no a la voluntad de Dios, pero aunque esto resulte interesante analizarlo, profundizarlo y hablar del tema, me gustaría que nos centráramos en el pasaje del ciego sanado en dos etapas, os diré mientras escribo el por qué de esta razón. Leyendo este pasaje, ¿no os llama la atención la actitud de Jesús con el ciego? ¿por qué lo sanó dos veces y no de una vez? ¿acaso no tenia poder para hacerlo? ¿dudó de su poder? son preguntas que uno puede cuestionarse cuando lo lee sin referencia alguna pero si tenemos en cuenta el pasaje anterior, podríamos ver alguna similitud bastante significativa. Ambos pasajes están seguidos uno tras otro con una intención clara, a propósito, no de casualidad. Están interrelacionados porque los dos quieren resaltar la ceguera del hombre, y no me refiero a la ceguera física... sino a la espiritual. Eso fue lo que les pasó a los discípulos, pensaron en la levadura física pero no en la espiritual. ¿Para qué sirve la levadura? ¿alguno/a ha hecho un queque, un bizcocho o cualquier otro postre alguna vez? sus ingredientes son fáciles ¿verdad?: huevo, harina, nata, levadura... algunos podrían decir: "Bueno, la levadura hace que el queque o el bizcocho se infle y así quede bien"; si, es cierto pero eso es lo que se ve, ¿y lo que no se ve? La levadura, internamente, cuaja todos los ingredientes del postre y lo hace compacto y sólido, juntando todos los sabores para convertirlo en uno solo y así se forma un queque o un bizcocho delicioso. De la misma manera, apliquemos esto a lo que quería decir Jesús con la levadura de los fariseos y herodianos. Daba a entender que su doctrina era peligrosa para ellos, les advirtió de ello porque sabia de lo que eran capaces esas personas religiosas que solo deseaban el favor del pueblo y su propio orgullo y prepotencia, se creían santos y que lo sabían todo, por eso se preocupó de advertirles de esta manera. El pasaje del ciego ilustra de una forma más concreta, sencilla y eficaz lo del pasaje anterior, la primera etapa el ciego ve borrosas las imágenes de su alrededor, a las personas como árboles que andaban y luego la segunda etapa, estaba restablecido por completo. 

Muchas veces nos pasa esto con Dios. No tenemos en cuenta su voluntad y sus cosas y andamos medio ciegos por la vida, vemos las cosas borrosas, difuminadas, creemos que es una cosa y la confundimos con otra, tropezamos sin ver la piedra a escasos centímetros del pie y caemos en el fango de la desesperación. No nos acordamos de Él y andamos perdidos por la vida. Permitidme contaros una historia. 

Esta es la historia de una chica que vivía con una humilde familia en un pueblo, esta chica tenia una familia con tres hermanas y ella era la mediana de las tres. Para su desgracia, de sus hermanas ella era la menos agraciada, no se podría catalogar como fea pero si la comparáramos con ellas pues se vería la diferencia. Cada una tenia siempre una tarea en la casa y la suya, normalmente, era hacer recados en el mercado del pueblo. Asi que, un día como otro cualquiera, fue a hacer su mandado a órdenes de su madre, al salir, se encontró a un chico de aproximadamente su edad sentado en un banco. Curiosa, se acercó a ver quién era y le saludó diciéndole su nombre con simpatía, el chico le devolvió el saludo sin sorprenderse pues ya sabia de su acercamiento desde antes. La muchacha se dio cuenta de que no la miraba y cuando quiso abrir la boca para hablar, el chico la interrumpió: "Si, soy ciego" , cerró la boca de golpe y sentándose con él, habló largo rato estableciendo una amistad. Recibió una pequeña bronca de su madre por llegar tarde pero eso a ella no le importaba. Asi, cada vez que iba al mercado, se encontraba al chico ciego sentado en el mismo banco y platicaban y platicaban sin parar y entre ellos nació una bonita amistad y posteriormente se enamoraron. La familia de la joven se dio cuenta de ello y aunque le preguntaban, ella rehuía las preguntas feliz y enamorada. Sin embargo, toda esa felicidad fue empañada al enterarse de boca de su amado que podía recuperar la vista, al parecer el médico le había dicho que cabía la posibilidad de que se operase y volviera a ver. La chica se dividió: por un lado estaba feliz por él pero por otro lado se entristeció y tuvo miedo puesto que por fin iba a verla después de tanto tiempo y temía que viendo cómo era su aspecto, la rechazara. Tras varios días sin verse, el chico se operó en el hospital y todo salió de maravilla, toda su familia estaba contentísima por su hijo y éste no paraba de preguntar por su amada, que quería verla. En esos días, una de las primas de la chica la visitó con su familia, la prima era una chica preciosa, con ojos azules y pelo largo, y se enteró por encima de lo ocurrido; al buscarla a la casa, la joven se negó a ir a ver su amado ya que tenia mucho miedo pero su prima, dándole ánimos la acompañó al hospital para que no se sintiera sola. Una vez allí, la aterrorizada muchacha entró en el cuarto y el chico se viró para verla, contento porque por fin podía ver su rostro por primera vez. Tan pronto como la vio, la sonrisa se le borró de la cara y se quedo mirándola fijamente, la chica temblaba, temblaba y mucho, expectante ante lo que pudiera decir. Fueron unos segundos tensos y difíciles y el chico, finalmente, dijo con desprecio: "Eres lo mas feo que he visto en mi vida. ¿Cómo he podido engañarme por tanto tiempo? Vete, lárgate de aquí, no quiero verte nunca mas". La apuñalada que la chica recibió en el corazón fue brutal y rompió a llorar allí mismo, destrozada por sus palabras, las palabras del chico al que amaba y que ahora la despreciaba. Mientras tanto, el muchacho al ver a la prima se quedo prendado de ella por su belleza y se olvidó de su amada. La muchacha, dolida y desesperada, salió a escape del hospital...... y se suicidó..... 


No sé como reaccionaran algunos de ustedes cuando lea esta historia pero yo lloré con esta historia cuando me la contaron, es muy fuerte oír este tipo de cosas y que desgraciadamente pasa hoy en dia. No es ficción, es una realidad, hay gente que todavía hacen estas cosas y destrozan vidas sin necesidad. Ese chico se enamoró de esta chica por su forma de ser, el siempre estar ahí con él a pesar de que era ciego, y sin embargo cuando vio como era realmente, su físico, la despreció. Se fijó en el exterior y no en el interior, en lo preciosa que era, y prefirió mil veces a la prima de ella que era preciosa con sus ojazos azules y todo eso. De ahí nace la frase: "La belleza está en el interior" pero estamos tan acostumbrados a oírla que no le sacamos su jugo, su verdadero significado. No es ciego el que lleve unas gafas oscuras de sol o un perro domado para guiarle, también es ciego aquella persona que no ve las cosas del interior, la belleza interior. 



Espero que os guste esta entrada. Muchas gracias nuevamente por vuestra atención. Bendiciones

2 comentarios:

  1. empezare dando mi opinión sobre la historia dramática de amor que te contaron y que a su vez nos has hecho llegar. creo que quien te lo contó cree que es verdad y asimismo tu crees que es cierta esta historia pero a mi me cuesta trabajo creerla por dos razones: la primera, la crueldad con la que se expresa el chico que había sido ciego parece mas propia de personaje malvado de telenovela mexicana que otra cosa y la segunda si en realidad el era de esa manera...¿como pudo ella enamorarse de el?
    y en definitiva me parece que suicidarse por eso es cosa de otros siglos mas "románticos" y no cosa de ahora. lo siento, pero, no me creo la historia.

    respecto al pasaje bíblico que nos has relatado yo entiendo que la levadura lo que hace es llenar de aire la masa de pan al fermentar, es decir, parece que hace crecer las cosas pero en definitiva no es mas que aire lo que aporta. en este contexto entiendo las palabras del Señor, el cual advierte a los apóstoles sobre la verborrea de ellos ya que estaban vacías de contenido.

    respecto a que el ciego recuperara en dos tandas la vista la conclusión que saco es la de que recibió la bendición de ver y por si fuera poco, de ver al Señor. ¡gran bendición sin duda!

    ha sido, como siempre, muy interesante esta nueva entrada mi querida Séfora. muchas gracias.
    Un fuerte abrazo y que el Señor te bendiga.
    Pili.

    ResponderEliminar
  2. Como siempre muchas gracias Pili por tus comentarios. Te aclare algunas cosas. Primero, la historia, no es cuestión de que sea creíble o no, simplemente es un punto de referencia sober la ceguera en la que esta sometida el hombre hoy en día, la historia puede ser perfectamente ficticia simplemente doy a entender que hoy en día eso sigue en vigor. Lo que doy a entender con la levadura no solo es como tu recalcaste en el contexto de la historia de los discípulos y Jesus son palabras vacías sino que ademas transforma, es decir, mina todo lo que toca eso es lo que hace la levadura en un queque cuando se mezclan los ingredientes.

    Sin mas, un saludo tía pilo y muchas gracias. Dios te bendiga mucho a ti también. besos

    ResponderEliminar